Hace mucho mucho mucho tiempo, en la televisión pública cuando veíamos programas infantiles en ocasiones en lugar de anuncios, nos ponían cortos de Bugs Bunny y compañía. Eran pequeñas obras muy ácidas que se nos marcaron a fuego en nuestro cerebro.
Hoy os traigo una de esas maravillosas obras, un clásico en el que bugs dirige a la orquesta sinfónica de Londres. Una pasada.
0 Comentarios